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Patatas bravas con salsa brava casera

Patatas bravas con salsa brava casera: ¡Un clásico de las tapas españolas!

    La cocina española es conocida por sus deliciosas tapas, y dentro de ellas, las patatas bravas son una de las opciones más populares.

    Esta receta clásica se ha convertido en un símbolo de la gastronomía española, y es fácil de preparar en casa.

    Con una salsa brava casera y patatas crujientes, este plato es perfecto para acompañar una mesa de tapas o como aperitivo en una noche con amigos.

    INGREDIENTES

    • 4-6 patatas medianas
    • 1 cebolla picada
    • 2 dientes de ajo picados
    • 1 pimiento rojo picado
    • 1 taza de tomate triturado
    • 1 cucharadita de pimentón
    • 1 cucharadita de azúcar
    • Sal y pimienta al gusto
    • Aceite de oliva
    • 1 cucharada de vinagre de vino tinto

    PREPARACIÓN

    La preparación de esta receta comienza con la cocción de las patatas, que deben ser peladas y cortadas en cubos pequeños, luego se fríen en aceite de oliva hasta que estén doradas y crujientes.

    Mientras se fríen las patatas, se puede comenzar a preparar la salsa brava, que es la base de este plato, con un sabor intenso y picante.

    La salsa brava se hace sofriendo la cebolla, el ajo y el pimiento rojo en aceite de oliva, hasta que estén tiernos y fragantes, luego se agrega el tomate triturado.

    El pimentón, el azúcar, la sal y la pimienta, y se deja cocinar a fuego lento durante unos minutos, revolviendo ocasionalmente, hasta que la salsa esté espesa y con un sabor intenso.

    Una vez que las patatas estén fritas y la salsa brava esté lista, se combinan ambos ingredientes en un tazón, y se agregan un chorrito de vinagre de vino tinto y un poco de aceite de oliva, para darle un toque final de sabor y textura.

    Este plato es perfecto para aquellos que les gusta la comida picante, ya que la salsa brava tiene un toque de picante que lo hace único y delicioso.

    Si lo deseas, puedes ajustar el nivel de picante al gusto, agregando más o menos pimentón, o incluso agregar otros ingredientes picantes como guindillas o cayena.

    La presentación de este plato es muy importante, ya que se sirve en un tazón o fuente, y se decora con un poco de perejil picado y un chorrito de aceite de oliva, lo que lo hace muy atractivo y apetitoso.

    Así que no dudes en probar esta receta en casa, y disfrutar de un clásico de la cocina española, ¡que seguro te encantará! ¡Anímate a cocinar y a disfrutar de este delicioso plato con tus amigos y familiares!