Sopa de ajo castellana: ¡Un plato tradicional y lleno de sabor!
La cocina tradicional española es conocida por sus platos sencillos y sabrosos, que a menudo se han transmitido de generación en generación.
Uno de estos platos es una sopa que se ha convertido en un clásico de la región de Castilla, y que es capaz de satisfacer cualquier apetito.
Esta sopa es una excelente opción para cualquier momento del año, ya sea para calentarse en un día frío de invierno o para disfrutar de un almuerzo ligero en verano.
INGREDIENTES
1. 4 dientes de ajo
2. 2 cucharadas de aceite de oliva
3. 1 cebolla picada
4. 2 rebanadas de pan
5. 1 litro de caldo de pollo
6. Sal y pimienta al gusto
7. 2 huevos
8. Queso rallado (opcional)
PREPARACIÓN
La preparación de esta sopa comienza con el picado de los ajos y la cebolla, que se sofríen en aceite de oliva hasta que estén dorados y fragantes.
Luego se añade el pan, que se ha cortado en pequeños trozos, y se cocina hasta que esté ligeramente tostado.
A continuación, se vierte el caldo de pollo y se lleva a ebullición, después de lo cual se reduce el fuego y se deja cocinar durante unos minutos hasta que el pan esté suave y la sopa esté caliente.
Mientras la sopa se cocina, se baten los huevos en un tazón y se añaden lentamente a la sopa, revolviendo constantemente para evitar que se formen grumos.
Finalmente, se sazona con sal y pimienta al gusto, y se sirve caliente, con un poco de queso rallado por encima si se desea.
Para disfrutar al máximo de esta sopa, es importante utilizar ingredientes frescos y de alta calidad, como ajos y cebolla recién picados y un caldo de pollo casero.
También es recomendable servirla en un tazón grande y honda, para que se pueda disfrutar de toda la textura y el sabor de la sopa.
Así que no dudes en probar esta receta y descubrir por qué es un plato tan querido en la región de Castilla.
Con su sabor intenso y su textura suave, esta sopa es una excelente opción para cualquier comida, y es seguro que se convertirá en uno de tus platos favoritos.